La musicología, así como lo que se suele denominar «música clásica» y otras formas de composición que no llegan al gran público no están exentas de las diversas formas de machismo que despliega el patriarcado. Marisa Manchado, compositora de música contemporánea y editora de Música y mujeres, es y ha sido consciente de este sesgo, así como de la falta de estudios que lo contemplasen. Así, en 1990, y gracias al impulso de la editorial —hoy desaparecida— Horas y Horas, decidió contactar a compañeras de profesión y estudios y dar forma a una obra que recopilase diversas maneras de enfocar un estudio feminista y musicológico. De este modo, por primera vez en España, aparecía publicado un libro que aunase autoras y compositoras de distinta procedencia y formación sobre musicología feminista.

Ahora bien, cabría detenerse en esto que hemos denominado musicología feminista, puesto que la obra no trata tanto de conceptualizarlo, si bien existe algún estudio en el libro que lo aborda —el de Teresa Cascudo—, más bien pretende ofrecer un ejemplo práctico de cómo afrontar esa posibilidad. Así, por ejemplo, Ellen Waterman (traducida por Jane Rigler y Rafael Liñán) propone su propia interpretación de una obra de Ferneyhough, que está basada en el mito de Casandra, y cómo ella la interpretó desde una perspectiva de género. A este respecto, se ha de mencionar el estudio de Ángeles Sancho Velázquez, pues aborda el estudio de una de las composiciones más conocidas de Strauss, Salomé. De igual modo, hay una revisión historiográfica y periodística, en primera persona, del primer programa dedicado a mujeres compositoras en la radio española (Amelia Die Goyanes). También, una aproximación histórica que pone en valor el trabajo de las mujeres en la educación musical (Joaquina Labajo) o sobre los «errores» que parecen accidentales, pero que guardan en realidad una buena dosis de machismo (Josemi Lorenzo Arribas). En este sentido, también cabe destacar el estudio sobre el Siglo de Oro y el papel de la mujer en él por parte de Pilar Ramos López. También, podemos señalar el estudio de Cecilia Piñero Gil, por un lado, y el de Alicia Valdés Cantero, por otro lado, sobre compositoras que, además de haber sido olvidadas por mujeres, también lo han sido por pertenecer a sociedades que no son occidentales. Y como colofón una serie de entrevistas a autoras y compositoras españolas, que nos permite descubrir una buena lista de nombres para adentrarnos en la música contemporánea hecha por mujeres.

Es, por tanto, destacable por dos motivos: el primero, ser el primer estudio publicado en castellano sobre musicología y feminismo; el segundo, plantearlo desde una perspectiva práctica, es decir, no conceptualizar, sino establecer posibles marcos de estudio al respecto de la cuestión planteada.

Esta nueva edición cuenta, además, con un estudio sobre la situación actual de la musicología y el feminismo y un prólogo de Ángel Medina Álvarez (catedrático de la Universidad de Oviedo).